Lc. 1,26-38
"María dijo:
soy la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra"
"María dijo:
soy la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra"
No temas, María. No temas, nos dice también a nosotros la voz del ángel, la
voz de Dios. No temas…
Vivir en el temor de Dios es, quizá, un primer paso necesario. Superarlo es
abandonarse en los brazos de su amor y esperar contra toda esperanza: ¿Cómo
será eso, si yo…?
Confiar. Confiar plenamente. Y entonces habitará en nosotros, en ti y en
mi, la Palabra, el Verbo, el mismo Dios.
Confía y hazle sitio en tu interior. Confía y ponte a su servicio. Confía y
deja que se haga en ti según su Palabra.
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