miércoles, 31 de octubre de 2018

TODOS LOS SANTOS Y DÍA DE DIFUNTOS (Dmp 5/18-19)



"El amor es eterno mientras dura". La primera vez que oí esa frase me molestó, me pareció una ironía y una burla hacia quienes defendemos que puede existir un amor para toda la vida. Con el tiempo, descubrí otra interpretación diferente: el verdadero amor siempre tiene vocación de eternidad. Aunque un amor pudo acabarse, mientras duró era un amor para siempre; nadie puede amar de verdad poniendo plazos a ese amor. Cuando amas, amas para siempre; aunque después pase lo que pase…

El amor de Dios es eterno: nos amó desde siempre y para siempre. “En esto consiste el amor, no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amó primero”. (1Jn 4, 10) En el acto de la creación, también en el de nuestra propia creación, ese amor se desbordó, se dio a raudales. Y ese amor, porque es auténtico, tiene vocación de eternidad, es para siempre y, por ello, es más fuerte que la muerte.

Celebrar el día de todos los santos y el día de difuntos es celebrar que el amor de Dios, como todo amor verdadero, es eterno. Ésa es la garantía de que ese amor va a prolongarse más allá de la muerte, porque no tendría sentido haber sido creados para la muerte. Cualquiera de nosotros querría que la persona a la que ama no muriera nunca. También Dios lo quiere.

Algunos dirán que no tenemos pruebas. Quien ha sentido en su vida el amor de Dios las tiene. Porque el amor es eterno.


No hay comentarios:

VISITES / VISITAS des de 19/06/2007